Ignífugo: ¿Que no se quema o que retarda el fuego?
Son materiales que tienen mayor resistencia frente al fuego, "ignis" en latín fuego, unido al sufijo fugo. La palabra ignífugo viene de raíces latinas y significa "que espanta el fuego". Está formado por la palabra latina "ignis" (fuego) y el sufijo -fugo que proviene del verbo "fugare" (espantar).
Debido al desconocimiento del sentido ignífugo, tendemos mucho a considerarlo como una propiedad milagrosa, algo prodigioso, si es ignífugo y hay fuego, no le pasará nada al producto que posea esta condición, ya sea un tejido ignífugo, un material ignífugo, una pintura, madera ignífuga... No le pasará nada, se quedará intacto.
Erróneamente, muchos piensan que sí un tejido o material se le coloca el adjetivo ignífugo significa que no se quema, que se quedará intacto si se le acerca fuego. Si bien en el caso de los tejidos existe una gran diferencia entre los que son fabricados con fibras ignífugas permanentes y los que reciben un tratamiento ignífugo, será más entendedor si traducimos textualmente esta palabra del inglés al castellano:
- Inglés: Flame retardant (FR).
- Castellano: Retardante a la llama, resiste a la combustión.
Lo que significa, que si a un material ignífugo le acercamos fuego, su reacción a la combustión será mucho más lenta, se quemará, pero si la llama se retira, este dejará de arder. Son materiales que al inflamarse no propagan la llama, que tienen mayor resistencia frente al fuego.
Por ello se habla de tiempo de resistencia al fuego en los materiales ignífugos. Esta propiedad es muy importante para lograr entender que cuando nos referimos a ella estamos ante materiales, productos y/o sustancias que nos pueden proteger del fuego en un intervalo de tiempo determinado.