¿Cómo proceder después de haber utilizado la manta para coches?
La manta ignífuga para control de incendios en coches es un elemento de seguridad muy versátil y que se complementa con otras que se usa en diferentes situaciones:
USO DE LA MANTA IGNÍFUGA PARA PREVENCIÓN DE INCENDIOS EN VEHÍCULOS ELÉCTRICOS O DE GASOLINA
La manta para coches es un elemento de seguridad versátil que no se utiliza exclusivamente en casos de incendio, sino que se usa también como herramienta de prevención en situaciones de riesgo, como por ejemplo durante el transporte de vehículos que hayan sufrido algún tipo de percance en carretera. También, por ejemplo, en talleres mecánicos en los que se estacionan vehículos que hayan sufrido algún impacto o con las baterías en mal estado.
USO DE LA MANTA PARA EXTINCIÓN DE INCENDIOS EN COCHES DE GASOLINA
La manta está diseñada para extinguir incendios en coches de gasolina, cubriéndolos completamente y evitando así la entrada de oxígeno proveniente del exterior. Mediante esta técnica se logra “ahogar” el fuego y extinguirlo pasado un tiempo. En ningún caso tiene que levantarse la manta sin la supervisión de los bomberos, ya que la entrada de oxígeno podría reavivar el fuego provocando una situación de alto riesgo.
USO DE LA MANTA PARA EL CONTROL DEL FUEGO EN COCHES ELÉCTRICOS
El principal hándicap de los coches eléctricos es que sus baterías de litio generan gases inflamables cuando están ardiendo. Por lo tanto, el uso de una manta no logra extinguir el fuego, pero si permite controlar la propagación de las llamas, minimizar la radiación de calor y también atrapar parte de las partículas tóxicas que se liberan con los gases.
¿CUÁNDO ES MÁS SEGURO RETIRAR LA MANTA DE ENCIMA DEL VEHÍCULO?
En caso de incendio y uso de una manta para coches, es imperativo contactar con los servicios de emergencia. Ellos sabrán cual es la forma más segura de actuar e indicarán los pasos a seguir para la correcta extinción del incendio.
La manta es un elemento contra incendios que permitirá a los bomberos trabajar más cerca del vehículo en llamas y de forma más segura. Los servicios de emergencia son las únicas personas autorizadas para decidir cuándo puede retirarse la manta de encima del vehículo.
El uso de una manta ignífuga para apagar incendios en vehículos es una solución efectiva y rápida para detener la propagación de las llamas. Sin embargo, cuando se ha controlado y extinguido el fuego, surge la duda sobre qué pasos seguir para desechar o reutilizar la manta. En este artículo, te ofrecemos una guía sobre qué hacer después de utilizar una manta ignífuga para coches y cómo proceder.
¿QUÉ HACER CON LA MANTA PARA COCHES CUANDO SE HA USADO?
Si la manta se ha usado de forma preventiva, lo que significa que no ha estado en contacto directo con el fuego, puede reutilizarse después de realizar el siguiente procedimiento:
- Limpieza y descontaminación de la manta: Antes de almacenar la manta, es esencial realizar una limpieza completa para eliminar cualquier residuo depositado en su superficie, como cristales, piedras, polvo o barro. Si se detectan elementos incrustados, deben retirarse con precaución para no dañar el tejido.
- Revisión de daños: Se debe revisar cuidadosamente que tanto el tejido como los elementos adicionales, como las asas, estén en perfecto estado. Es importante asegurar de que no hay cortes, rasgaduras o desperfectos que puedan comprometer la funcionalidad de la manta, poniendo especial atención en las costuras.
- Plegado: Es importante seguir las instrucciones de Texfire para plegar correctamente la manta. Este paso es crucial para garantizar un despliegue rápido y efectivo en caso de emergencia. Se recomienda que al menos dos personas realicen este proceso para asegurar un plegado óptimo.
En caso de que la manta haya sido utilizada en un servicio de extinción:
- Enfriamiento: Después de retirar la manta, se recomienda esperar unos minutos a que la manta se enfríe. El tejido con el que está confeccionada disipará rápidamente el calor, pero puede haber restos de plásticos o metales fundidos que hayan quedado pegados al tejido y representen un riesgo de quemadura, en caso de contacto directo con la piel.
- Uso de EPI’s: Es importante el uso de los EPI’s (Equipos de Protección Individual) adecuados, como guantes o mascarillas, si se va a manipular la manta después de un incendio. Ya que la manta puede contener plásticos, metales, cristales, líquidos corrosivos, partículas tóxicas, entre otros, adheridos al tejido. Estos elementos pueden ser peligrosos o producir irritaciones en caso de entrar en contacto directo con la piel, o en caso de respirarlos, o también pueden suponer un riesgo de corte.
- Centro de residuos: Se recomienda no manipular la manta más allá de lo necesario ya que después de un incendio quedan pegadas partículas altamente tóxicas. Con precaución ha de llevarse a un centro de tratamiento de residuos. En ningún caso puede desecharse en un contenedor de la basura o en cualquier lugar que no sea el indicado.